

Quisiera compartir con ustedes una hermosa reflexión a propósito de nuestra actitud con respecto a la Cruz. Hace algunos años tuve la bendición de participar en la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro. Allí pude escuchar y ver al Papa Francisco en un momento de mi vida en el que estaba tomando decisiones muy importantes y que me llevaban a cuestionar cuál debía ser mi lugar frente al Señor.
Jesucristo, encarnación de la misericordia de Dios, ha muerto en cruz por amor, y por amor ha resucitado.
— Papa Francisco (@Pontifex_es) 3 de mayo de 2016
Fue entonces en el Vía Crucis, cuando el Santo Padre dirigió estas palabras a todos los jóvenes que allí estábamos, y fueron como un baldazo de agua fría para mí:
«Muchos rostros han acompañado a Jesús en su camino al Calvario: Pilato, el Cireneo, María, las mujeres… También nosotros podemos ser para los demás como Pilato, que no tiene la valentía de ir contracorriente para salvar la vida de Jesús y se lava las manos. Queridos amigos, la Cruz de Cristo nos enseña a ser como el Cireneo, que ayuda a Jesús a llevar aquel madero pesado; como María y las otras mujeres, que no tienen miedo de acompañar a Jesús hasta el final, con amor, con ternura. Y tú, ¿como quién eres? ¿Como Pilato, como el Cireneo, como María? Jesús te está mirando ahora y te dice «¿Me quieres ayudar a llevar la cruz?».
¿Cómo quién quieres ser? Esa frase quedó resonando en mi cabeza (hasta hoy lo sigue haciendo) y me hizo pensar mucho en qué hubiese hecho yo si hubiese estado allí en el momento de la Pasión y la Crucifixión. ¿Cómo quién de todos los presentes hubiese reaccionado? ¿Cómo quién de ellos actúo frente al Señor que se entrega por mí día a día?
El video de la canción «Si hubiera estado allí» de Jesús Adrián Romero, nos ayuda a cuestionarnos en serio: ¿Cuántas veces somos como Pedro negándolo, o como el centurión burlándose, o como los discípulos avergonzándonos de Él? ¿Cuántas veces lo seguimos crucificando?
Aprovechemos hoy, día de la Santa Cruz, para volver nuestra mirada a Jesús Crucificado, y mirar con esperanza lo que se viene en nuestras vidas, pues ese Jesús que sufre y muere por nosotros, también resucita por mí y por ti para abrirnos el cielo y elevar nuestra dignidad, para hacernos Hijos de Dios. Un Dios que no deja de apostar una y otra vez por nosotros a pesar de nuestras caídas, que nos levanta y reconcilia.
«¿Qué deja (la Cruz) en cada uno de nosotros? Deja un bien que nadie más nos puede dar: la certeza del amor indefectible de Dios por nosotros. Un amor tan grande que entra en nuestro pecado y lo perdona, entra en nuestro sufrimiento y nos da fuerza para sobrellevarlo, entra también en la muerte para vencerla y salvarnos» (Papa Francisco, en Vía Crucis de la JMJ de Río de Janeiro).
Rafael me parece lamentable que se dediquen al Apostolado Catolico y esten tan mas informados, creo que necesitan urgentemente unas clases de Apologetica, jamas deberina utilizar nada de sectas para su apostolado, yo se que la letra es bonita, tienen una super produccion estos hermanos, pero por etica, por solidaridad no podemos nosotros usar sus temas jamas en nuestra mision.
A la mejor si tu estas muy bien preparado no te van a confundir, pero la mayoria de los catolicos no tienen ninguna pareparacion y si tu les das musica evangelica o de cualquier otra denominacion, van a ver sus videos, ir a sus conciertos, comprar sus cds y terminan mas confundidos siendo este el menor de los males, y muchos cambiados de religion.
Asi que por favor pongan mucha antencion en lo que publican o no se llamen catolicos.
Gracias!
Comparto y apruebo el comentario atinado de Doña Sonia Peña todas las canciones protestantes están saturadas de doctrina protestante sea subliminal o no y no considero prudente exponerlas a un público que no conocemos