Las cosas claras: no me interesa promover a Vicentico ni a su música; es más, no me llevo bien con ninguno de los dos (opinión personal). Lo único que quiero con este post es compartirles una canción que me ha llamado mucho la atención y que, para ser sinceros, no me la esperaba viniendo del ex-vocalista de los Fabulosos Cadillacs.  ¿El hombre se está convirtiendo? Lo dudo. ¿Vicentico se está acercando a Dios? Ni idea. ¿La canción es buena? Me parece genial; y creo que vale la pena compartirla.

Me parece un canto sincero de alguien que se pregunta por la verdad y el alcance del amor de Dios: ¿es cierto, Señor, qué tu amor puede sanar el corazón de los hombres? Si ese amor existe, si ese amor es auténtico, la canción nos propone la consecuencia más sensata: convertirse en un soldado de ese amor. Esto, por otro lado, es una llamada de atención a los cristianos; y es que «Soldado de Dios» es el canto de un agnóstico en búsqueda, de una persona que aún no tiene fe pero que descubre con claridad que si los contenidos de esa fe fuesen ciertos – es decir, si el amor de Dios realmente salvara – no quedaría otra posibilidad sino abrazarla seriamente. Nosotros, católicos, convencidos de nuestra fe, ¿actuamos como soldados de Dios? Creo que en muchos casos no; por eso, dentro de todo, la mirada de Vicentico me ha resultado renovadora y creo que podría ser útil para muchos de nosotros.

Dinámica

Enfrentar la pregunta: ¿Qué significa para ti ser un soldado de Dios? ¿Qué me falta para asumir todo lo que ello implica? ¿Me falta fe, hay algo de lo que no estoy convencido o es más bien un problema de otro tipo?