

Cristo ha resucitado, ¡verdaderamente lo ha hecho! Luego de haberlo acompañado en su Pasión y muerte en esta Semana Santa, ahora nos alegramos inmensamente con su resurrección. Hagamos de nuestra vida un Vía Gaudium, un camino de alegría con Él.
Los días de la pasión de Cristo han sido por demás duros, sobre todo para sus discípulos. Y, aunque la alegría es grande, el recuerdo de la Cruz está aún vivo en sus memorias.
Así lo sintieron sus apóstoles, por eso Jesús los invita a regresar a Galilea. Regresar a Galilea significa renovarse en la alegría, en el espíritu de triunfo de su resurrección.
Pensando en esta necesidad nuestra, de también «volver a Galilea» para encontrarnos con la alegría del Señor hemos elaborado esta oración a la que hemos puesto por nombre Vía Gaudium.
Con ella pretendemos recorrer un camino, a modo de estaciones, recordando los momentos de honda alegría que Jesús vivió cuando estuvo de paso por la tierra, viviendo con nosotros, siendo nuestro maestro.
Cuando se encontró cara a cara con cada uno de sus amigos, con los que creyeron en Él, con todos aquellos que le dijeron, sí. Recordemos que Jesús nos amó hasta el extremo y nos sigue amando así a cada uno de nosotros.
Empecemos este recorrido, este Vía Gaudium, llenos de la alegría de la resurrección y la esperanza de, al final, estar para siempre en su presencia.
Primera estación: La alegría del Jesús niño abrazado por su Madre
“…vi al Niño que se movía y le oí llorar. En ese momento fue cuando María pareció volver en sí misma y, tomando al Niño, lo envolvió en el paño con que lo había cubierto y lo tuvo en sus brazos, estrechándole contra su pecho.” (Extracto del relato de la visión de Santa Catalina de Emmerick)
Meditación: Señor, el abrazo de tu Madre es para ti fuente inagotable de alegría, consuelo y amor. Así también, yo también quiero perderme en ese corazón dulce y tierno de María, madre tuya y Madre Nuestra.
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Segunda Estación: Jesús pasa su infancia al cuidado de su padre, José
“Y se fue a vivir a una ciudad llamada Nazaret, para que se cumpliera lo dicho por medio de los Profetas: «Será llamado nazareno»”. (Mt 2, 23)
Meditación: Jesús, estuviste 30 años en el seno de tu hogar. Cuántos de estos al lado de San José. Bajo la calidez de su sonrisa, la protección de su brazo y las enseñaszas de tu oficio. Qué nosotros también, con alegría, sepamos hornar a nuestros padre en la tierra y amar profundamente a nuestro Padre Celestial.
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Tercera Estación: Jesús pasa 30 años en el seno de su hogar
“Bajó con ellos, vino a Nazaret y les estaba sujeto. Y su madre guardaba todas estas cosas en su corazón. corazón. Y Jesús crecía en sabiduría, en edad y en gracia delante de Dios y de los hombres”. (Lc 2, 51:52)
Meditación: Que así como tú disfrutaste la alegría de la vida familiar, así nosotros sepamos vivir en familia, amando, respetándonos y creciendo en la fe juntos.
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Cuarta Estación: Jesús se alegra con sus discípulos y los llama amigos
“Al regresar los setenta y dos discípulos de su misión, Jesús se estremeció de gozo, movido por el Espíritu Santo… —Bienaventurados los ojos que ven lo que estáis viendo. 24Pues os aseguro que muchos profetas y reyes quisieron ver lo que vosotros estáis viendo y no lo vieron; y oír lo que estáis oyendo y no lo oyeron.“(Lucas 10, 21-24)
Meditación: Señor, tú te alegrabas por tus discípulos, tus amigos y sus logros. Los amaste con todo lo que eran, compartieron risas y momentos que cambiaron sus vidas. y tu palabra que era la vida misma los alimentó
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Quinta Estación: Jesús se alegra con la presencia de los niños
“Le presentaban unos niños para que los tomara en sus brazos; pero los discípulos les reñían. Al verlo Jesús se enfadó y les dijo: —Dejad que los niños vengan conmigo, y no se lo impidáis, porque de los que son como ellos es el Reino de Dios. En verdad os digo: quien no reciba el Reino de Dios como un niño no entrará en él. Y abrazándolos, los bendecía imponiéndoles las manos.” (Mc. 10, 13:16)
Meditación: Qué seamos como niños Señor, capaces de mirar con ternura e inocencia. Que podamos reconocerte y que tú te alegres en nosotros”
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Sexta Estación: La alegría de Jesús al curar a los enfermos
“—Vete, tu hijo está vivo. Aquel hombre creyó en la palabra que Jesús le dijo y se marchó. Mientras bajaba, sus siervos le salieron al encuentro diciendo que su hijo estaba vivo.” (Jn 4, 50:51)
Meditación: Señor tu tienes palabras de vida. Que sepamos escucharlas para encontrar el remedio a los pecados que cargamos en nuestras almas. Que así como tú nos alegremos también con la sanación de cada enfermo y la salvación de cada alma.
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Séptima Estación: La alegría de Jesús al contar Parábolas a la gente
“Se reunió en torno a él una multitud tan grande, que tuvo que subir a sentarse en una barca, mientras toda la multitud permanecía en la playa. Y se puso a hablarles muchas cosas con parábolas.” (Mt 13, 2:3)
Meditación: Qué alegría debes de haber sentido, Señor al compartir con aquellos que te seguían y te querían escuchar. Qué delicadeza la tuya de hablarnos en un lenguaje que entendamos. Que nosotros también al llevar tu palabra lo hagamos con alegría y sencillez.
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Octava Estación: La alegría de Jesús frente a la celebración de las bodas
“Al tercer día se celebraron unas bodas en Caná de Galilea, y estaba allí la madre de Jesús. También fueron invitados a la boda Jesús y sus discípulos.”(Jn 2, 1:2)
Meditación: Que cada vez que asistamos a un matrimonio nos alegremos frente a lo que esa unión significa, así como te alegraste tú, llevando el vino para celebrar la unión y el convertirse en tu familia.
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Novena Estación: Jesús se alegra por la amistad especial que tiene con las mujeres
“Jesús le dijo: —¡María! Ella, volviéndose, exclamó en hebreo: —¡Rabbuni! —que quiere decir: «Maestro»”. (Jn 20, 16)
Meditación: Tu amistad con las mujeres fue inusual para aquel tiempo. Las trataste con la dignidad con las que fueron creadas desde el principio. Señor que siempre me alegre por el don de la mujer, por su maternidad y su sensibilidad honda”
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Décima Estación: Jesús, se alegra por la resurrección de su amigo Lázaro
“Jesús, cuando la vio llorando y que los judíos que la acompañaban también lloraban, se estremeció por dentro, se conmovió… Jesús rompió a llorar. Jesús rompió a llorar. Decían entonces los judíos: —Mirad cuánto le amaba.” (Jn 11 ,33:35)
Meditación: Jesús tanto amabas a tu amigo Lázaro que lo regresaste de entre los muertos. Que yo sea capaz de tener una amistad sana, profunda y verdadera, una amistad que me conduzca siempre a ti.
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Décimo Primera Estación: La alegría de compartir los viajes con sus discípulos
“Cuando estaba atardeciendo, bajaron sus discípulos al mar, embarcaron y pusieron rumbo a la otra orilla, hacia Cafarnaún. Ya había oscurecido y Jesús aún no se había reunido con ellos. El mar estaba agitado a causa del fuerte viento que soplaba.
Después de remar unos veinticinco o treinta estadios, vieron a Jesús que andaba sobre el mar y se acercaba hacia la barca, y les entró miedo. Pero él les dijo: —Soy yo, no temáis. Entonces ellos quisieron que subiera a la barca; y al instante la barca llegó a tierra, al lugar adonde iban”. (Jn6, 16:21)
Meditación: Señor, qué hermosos momentos junto a tus apóstoles. Obraste maravillas solo para ellos, fortaleciste su fe y acrecentaste su confianza al saberte sus amigos. Que pueda yo también compartir estos momentos de amistad auténtica contemplando los milagros de la maravilla de tu creación”
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Décimo Segunda Estación: Jesús se alegra por los 5 panes y los dos peces
“—Aquí hay un muchacho que tiene cinco panes de cebada y dos peces; pero, ¿qué es esto para tantos? esús dijo: —Mandad a la gente que se siente —había en aquel lugar hierba abundante. Y se sentaron un total de unos cinco mil hombres. Jesús tomó los panes y, después de dar gracias, los repartió a los que estaban sentados, e igualmente les dio cuantos peces quisieron. (Jn 6 ,9:11)
Meditación: Qué alegría sentiste Señor cuando ese joven te entregó todo lo que tenía. 5 panes y 2 peces son a penas lo que tengo, Señor. Que pueda entregarme todo por completo a ti.
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Décimo Tercer Estación: La alegría de Jesús al llevarse a su Madre al cielo
“Ella tomó su vuelo a través de ellos hasta el Trono de Dios y de su Hijo, quien haciendo brillar sobre todo lo demás la luz que salía de sus llagas, la recibió con un amor todo Divino, la presentó como un cetro y le mostró la Tierra bajo sus pies como si confiriese sobre Ella algún Poder Celestial.Así la vi entrar en la Gloria y olvidé todo lo que pasaba en torno de María sobre la Tierra.” (Extracto del relato de la visión de Santa Catalina de Emmerick)
Meditación: Qué vivamos esperanzados en el gozo eterno que has prometido para todos nosotros al llevarte a María al cielo en cuerpo y alma. Que sepa esperar, que sepa vivir, que sepa confiar en ti, Señor.
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Décimo Cuarta Estación: La alegría eterna de Jesús cuando se encuentre con nosotros en su reino
“Id, pues, y haced discípulos a todos los pueblos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo; y enseñándoles a guardar todo cuanto os he mandado. Y sabed que yo estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.” (Mt 28, 19:20)
Meditación: Jesús, tú ya estás con nosotros todos los días hasta el fin del mundo. Permítenos a nosotros elegirte libremente, optar siempre por tus enseñanzas y vivir con la mirada fija al cielo hasta el encuentro final en los brazos del Padre.
“Por tu Cruz y Resurrección nos has salvado Señor”
Rezamos un Padre Nuestro, Ave María y Gloria
Que la alegría de la Resurrección de Cristo nos acompañe siempre. Aún sabiendo que en el camino encontremos dificultades, no perdamos de vista la Galilea que también hemos vivido con Él.
¡Feliz Pascua de Resurrección!
Gracias por compartir. Dios les bendiga.
Gracias, gloria a Dios, hermoso transitar por este camino con ojos de gozo, por Jesús resucitado
Bendito seas por siempre Señor..!
Hola, como estás? quiero agradecerte porque este ejercicio lo aplicaré en la catequesis, me encantó.
Mil gracias y bendiciones
Me encanto! Una mirada de alegría.
Hermoso, es la primera vez, que lo veo y lo hago. Bendiciones
Gracias, vamos a Galilea.