

Hoy se celebra el día internacional del hermano. Qué agradable que podamos celebrar el valor incalculable de la hermandad, compartir los mismos lazos, los mismo padres, los mismo recuerdos y hasta la misma ropa. La familia es algo insustituible.
Este divertido video, de Fred Lammie (genial en sus animaciones), tiene unos años ya, pero desarrolla un tema siempre vigente mientras existan los hermanos: la aventura de ser el hermano menor.
Se me ocurre que puede ser un excelente recurso tanto para una escuela de padres como también para entender un poco más la historia familiar propia.
Yo soy la mayor de tres hermanos y puedo dar fe de cómo el menor se abre camino y reclama su lugar con todas sus fuerzas. Tengo tres hijos, y puedo notar también esa personalidad y fortaleza que nacen de ser el «más pequeño».
Las generalizaciones son algunas veces inoportunas, cada ser humano, cada familia y sus dinámicas son únicas. Pero nuestra humanidad y nuestros comportamientos tienen similitudes no en algunos, sino en varios aspectos que nos enriquecen y nos permiten actuar con mayor sabiduría y mayor preocupación por los demás.
Ser el menor tiene una característica muy especial
Podría decir que incluye una pedagogía propia para toda la familia. En el lugar donde vivo se hace referencia al hermano menor como «el corregido y el aumentado». Aquel que heredó lo bueno, pero además «masterizó» lo no tan bueno.
El menor aprende de la experiencia de los hermanos mayores más que cualquiera. Los padres tienen más experiencia como padres y por lo mismo tienen un estilo de crianza tal vez distinto al de sus hermanos, con más seguridad, con mayor experiencia, en fin.
Crecen mirando a todo el mundo hacia arriba
Ser el menor podría significar efectivamente todo lo que el video con humor nos relata. Pero también podría significar crecer mirando a todo el mundo hacia arriba. Tal vez bajo la sombra de los logros y el camino trazado por los mayores.
Las comparaciones suelen aparecer, así los padres hayan hecho el esfuerzo por no compararlos, la referencia está presente. Muchas veces al menor de los hermanos se le suele dejar de lado, incluso sin intención.
Por un lado esto podría fortalecerlo, ya que va a depender de sus propias habilidades para abrirse camino, pero por otro lado podría afectar en su autovaloración. Es decir en el valor que percibe sobre sí mismo.
Dar un espacio para cada hijo es importante
Conocer a cada uno de ellos implica no solo el tener un espacio para cada uno, más importante prestar la atención requerida por cada uno. Esto implica darse el tiempo de conocer a nuestros hijos. Sus fortalezas, sus dones, sus debilidades, para poder dar a cada uno lo que necesita.
Ser padre no es simplemente ocuparse de las necesidades básicas de nuestros niños. Ser padres significa formar seres humanos, ser colaboradores de la acción creadora de Dios.
El hijo menor y el rol de los padres
¿Qué tiene que ver un tema tan divertido como el que nos presenta el video, con la seriedad de ser padres? Pues mucho. Entender incluso el orden que ocupa cada hijo en la familia forma parte de ese conocimiento delicado, cercano, comprometido, amoroso, que cada padre tiene que tener con sus hijos.
No se cria en masa, se cria personalmente, uno a uno, de cerca. Así se fomenta el amor familiar, el amor entre hermanos, cada uno amado en una manera distinta. Ser el hermano menor es grandioso, pero también ser el hermano segundo, el del medio, el primero. «…no siempre somos conscientes, pero ¡es la propia familia la que introduce la fraternidad en el mundo!» (Papa Francisco).
Si eres el hermano menor déjanos saber en los comentarios cómo te sientes, ¿te identificaste con el video?, ¿te alegra ser el menor?, ¿qué es lo más difícil de serlo? ¡Cuéntanos!
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