

Aprovecho esta brevísima introducción para agradecer (a nombre de todos los lectores de Catholic-link) la generosa contribución de nuestros distinguidísimos blogueros asociados. Además de toda la labor apostólica que ya realizan desde sus propios blogs, han tenido la gentileza de donarnos un poco de su tiempo para crear este nuevo servicio de Catholic-link. ¡No dejen de visitar sus Blogs!
El primer video que presentamos bajo esta modalidad es «Defining a Prodigy». Es una excelente reflexión sobre la riqueza existencial de cada ser humano y la importancia de descubrir la propia vocación.
Néstor Mora (España), autor del blog «EclesiasTIC»



Sobre la entrega de uno mismo a Dios en vistas al descubrimiento del propio llamado. Quizás la pregunta que se esconde detrás del vídeo es ¿Qué es lo que quieres «ser» en la vida? A esta pregunta se contrapone otra no menos importante ¿Qué eres ahora mismo? Hoy en día la distancia entre las respuestas de ambas preguntas suele ser «demasiado para mi», «es imposible». Lo que «soy ahora mismo» se mira como la inmanencia estricta que hay en nosotros, olvidando la trascendencia; la potencia que hay en todos. ¿Cómo encontrarnos con esa trascendencia? Buena pregunta. No es sencillo toparse con ese extra que llevamos escondido en nosotros. Más bien, la el marketing tiende a desalentar que nos dediquemos a buscarlo… siempre es más fácil extender la mano y pagar, por lo que otros te dan.
Volvemos a definir distancias. Lo fácil es que «otro me dé el ser» a cambio de ¿Qué? ¿Dinero? ¿Prestigio? ¿Esclavitud? ¿Quieres ser un chico/a güay? Viste las zapatillas de moda, esto te elevará a ser más de lo que eres ahora. Cuando te des cuenta que nada cambia, habrá otras zapatillas esperándote. Cuando te des cuenta que las zapatilla no satisfacen la necesidad de «ser», habrá un automóvil, una casa, un viaje, un puesto de trabajo,… siempre algo que te dan otros a cambio de ¿Qué? Por contra, Dios no te da nada más de lo que ya eres, eres tu quien voluntariamente se puede donar a Dios. En ese acto de donación aparece la trascendencia y con ella, aparece toda la potencia que se esconde en nosotros. ¿Te das cuenta que fuimos creado para algo más que lo que actualmente aparentamos? No siempre. Para ello hace falta ese acto mágico que es la donación de si mismo al Señor.
Sebastián Campos (Chile), autor del blog: «SebaCampos»



Sobre el discernimiento de la propia vocación. El discernimiento de la vocación, no es lo mismo que el discernimiento de mi ocupación o mi carrera profesional… es más bien hacia el servicio, hacia el uso de mis dones para bendición de los demás y para involucrarme con el plan de Dios. Generalmente somos más superficiales y escogemos la ruta de nuestro camino basándonos en nuestro empleo, en nuestro sueldo, nuestro estado civil (soltero o casado) y pensamos que solo eso es responder al llamando de Dios, pero olvidamos todo lo demás que le da sentido a nuestra vida, todo fuera del trabajo, fuera de la profesión, todo eso que generalmente es lo que más nos apasiona pero que lo callamos, pues nos desconcentra y nos hace bajar nuestro rendimiento (…) No te entregues a creer que lo que vives y las circunstancias que hoy te tocan, son lo que debes vivir… Dios tiene algo que decir al respecto! Nosotros no creemos en el “destino”, creemos en el “propósito”, ese que tuvo Dios cuando te creó… ese propósito es el que debes reconocer o por lo menos comenzar a trabajar para descubrirlo.
Fran del Nido (Argentina), autor del blog: «Apóstol Totus Tuus»



Sobre la importancia de construir sobre roca y no sobre arena. El video nos invita a hacer un camino interior, a viajar hasta lo más profundo de nuestro ser y replantearnos nuestra vida, nuestros proyectos, nuestra misma existencia. me recuerda la frase de San Agustín «no vayas fuera de ti, vuelve a ti mismo porque en tu interior habita la verdad». Como en la parábola de los talentos, Dios nos ha dado a c/u determinados dones. Y c/u una determinada misión, un determinado objetivo en la vida, un llamado, la Vocación. Si nosotros no los multiplicamos, no los entregamos al servicio de los demás y de Dios, y solo los guardamos para que esos dones sean el material para construir un egoísmo individualista, fabricamos una casa sobre arena. Y poco aguantará esa casa sobre esos cimientos. Quedará en la nada.
En cambio, si ponemos nuestros dones al servicio del prójimo y de Dios, esos mismos dones serán los que construyan una casa sobre roca firme, inamovible, que perdurará en el tiempo y será casa y hogar de muchos. «Nos hiciste, Señor, para Ti, y nuestro corazón está inquieto, hasta que descanse en Ti» (Conf. 1,1,1)
Manuel Rodriguez (Perú), autor del blog: «Roncuaz»



Sobre algunos peligros que tiene el video. Es evidentemente para un público juvenil o que recién comienza en la vida cristiana. Como arranque y cuestionamiento es muy bueno aunque creo que es demasiado «gringo» y algo clichetero en ese sentido. Sociológicamente está ubicado en clase media gringa y europea y clase AB latinoamericana, suena duro pero no es para pobres ni llama a ayudar a los pobres. Repito: como inicio de un camino interior está muy bien, no es mi intención ser un aguafiestas pero un apóstol tiene el deber de mirar en 360 grados y no quedarse en un nivel socioeconómico «cómodo».
Hay que ver cuando se usa el video porque puedes generar aspiraciones muy parecidas a las que hacen los comerciales con las consecuencias propias de esos estímulos: emotividad que se eleva y que puede generar un «compromiso» sentimental que con el tiempo se cae por carecer de raíces realistas. Lamentablemente lo he visto tantas veces que hay que decirlo creo yo…
Juan Lima (Argentina), autor del blog: «Hablemos en clave pastoral»



Sobre la importancia de descubrir aquello que nos mueve a donarnos. Es algo trascendental lo que te motiva y te mueve. Eso que sentís que “es algo extra que te mantiene despierto por las noches”, citando palabras del video. ¡¿A cuántos nos ha sucedido esto?!. Recordarás seguramente aquellas noches en las que te has quedado despierta/o hasta tarde, haciendo cosas para tus niños de la catequesis, los jóvenes del grupo o bien alguna actividad solidaria. Cuántos seguramente te han visto y dicho: ¡cómo perdés el tiempo en esas cosas!, ¡cómo te gusta malgastar el dinero…!, etc… pero, a pesar de esos discursos repetidos, vos permaneciste allí, fiel a tu deseo de dar, entregando tu cansancio, tu tiempo y esfuerzo, por aquello que sabías, haría felices a otros.
El deseo de dar, esa pasión que brota desde lo hondo del corazón, es inexplicable muchas veces para quien no lo comprende. Cuando mis compañeros de la universidad me lo preguntan sólo me sale decir “Dios me dio todo. La vida me dio todo. ¿qué otra cosa podría hacer que devolverle a Dios, a la vida, todo lo que yo pueda mientras esté vivo?. Con mis limitaciones, con mis fortalezas, con el mucho o poco tiempo disponible con el que cuento. En fin… ¿qué otra cosa podría hacer?”. En definitiva, quien da en serio, desinteresadamente, sin esperar nada a cambio, lo hace por amor. Amor que es respuesta a la vida dada por Dios. Citando palabras del Apóstol Pablo “Si yo no tengo amor, no soy nada” (1Cor 13,2)
Enhorabuena, me encanta la idea del «vídeo comunitario». Me tendré que pasar con más frecuencia por aquí, porque me gustaría participar en algún otro vídeo, siempre que tenga algo que decir sobre él. ¿Cómo funciona esto? Un abrazo
Excelente, Padre. Le envío un inbox.
Interesante todos los aportes de los blogueros.
Buenísimos!
Hola..He visto acá en la página que recomiendan algunas películas con interesantes mensajes y elementos apostólicos. Tengo una inquietud…Qué opinión tienen del film «Life of Pi» ?… ya vi la película y he sacado mi propio mensaje…Pero me gustaría saber su opinión..que elementos apostólicos se podrían analizar en esta producción?…Gracias!!!
No la he visto. Apenas la veo te comento Gabby,