

—¡Nunca me escuchas!
—Siempre es lo mismo
—No me prestas atención
—Das más importancia a tus amigos que a mí
—¡Ya es tiempo de que madures!
Estas son las típicas frases que a diario escucho en mi consulta clínica y es por eso que quiero darte tres puntos clave para que identifiques si las peleas en tu noviazgo son sanas o no.
1. Todas las parejas discuten, pero no todas se faltan el respeto
Tener peleas por sus diferencias es válido, pero insultar, gritar, humillar, amenazar con el fin de la relación o terminarla… no es sano. El respeto es la clave para llegar a comprender el punto de vista del otro.
2. Todas las parejas tienen diferencias, pero no todas las aceptan
Imagínate que ya están casados y viviendo juntos. Ya pasó el romance del día de la boda y la luna de miel. Ahora, el reto es organizar el hogar y de pronto aparecen estas preguntas:
¿Qué pienso del dinero?, ¿qué opino de la intimidad sexual y la frecuencia esperada?, ¿a quién le corresponde cocinar, lavar, limpiar?, ¿es válido frente a un problema llamar inmediatamente a papá o mamá?
Definitivamente, en muchos puntos no pensarán igual. Lo importante es comprender y aceptar el punto de vista del otro. Esto no implica estar de acuerdo, pero sí respetar que su percepción es distinta a la mía.
3. Algunas parejas deciden tener una guía y otras piensan que pueden solas
Recuerdo el caso de una amiga de mi grupo de oración. Ella se llevaba mal con su novio y para que no le dijeran nada, se alejó.
Felizmente, al pasar el tiempo, ella y su novio entendieron que necesitaban una guía para cuidar su relación. Participar de eventos, jornadas y entrenamientos es clave para que la relación madure y la vocación, en su parte humana, se fortalezca.
Por lo tanto, el respeto, la comprensión y el entrenamiento harán que las peleas en el noviazgo sean sanas y no se convierta en un ciclo sin fin.
Sí quieres saber más sobre cómo entrenar tu relación y cómo solucionar una pelea, te invito a descargar esta guía gratuita llamada: «Soluciona la pelea».
En ella te explico paso a paso, el nivel de intensidad de un conflicto, los cuatro Jinetes del Apocalipsis (el patrón de la pelea) y sus antídotos. ¡Anímate a luchar por tu relación!
Artículo elaborado por Italo Macha Mifflin.
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