María Magdalena es un nombre popular, muchas familias lo ponen a sus hijas y es porque representa no solo a una mujer que hizo las cosas mal y necesitó de la ayuda redentora del Señor, sino porque su testimonio de conversión, amor, entrega y discipulado la convierten en alguien digno de imitar. A esto que acabo de contarte quiero agregar algo que seguro va a hacer que se te crucen los cables: hay quienes aseguran que hubo más de una María Magdalena, incluso en la tradición de la Iglesia, algunos afirman que fueron dos o tres.

Entonces, ¿quién fue María Magdalena? Es que su nombre está rodeado de toda clase de mitos, interpretaciones, deformaciones catequéticas y una gran parte de ficción que carece de cualquier argumento. Todo eso sazonado con una pizca de morbo, de ataques contra la Iglesia, de Evangelios ocultos, de películas de ciencia ficción y de teorías de conspiración.

Se dice de ella que es una prostituta, una pecadora sorprendida en adulterio a quien iban a apedrear. Dicen que lavó los pies del Señor con sus lágrimas y los secó con sus cabellos, también dicen que ungió al Señor con un costoso perfume. Dicen que fue de las primeras testigos de la Resurrección y que antes de eso estuvo a los pies de la Cruz acompañando al Señor en su calvario valientemente, no como los apóstoles que huyeron.

Otras más osados dicen que fue pareja del Señor, algunos hasta aseguran que tuvieron hijos. Otros dicen que fue más importante que San Pedro y que el Señor la dejó a ella a cargo de la Iglesia. Como ven, teorías hay muchas. ¿Será que Lady Gaga tenia razón al decir que María Magdalena era la pecadora adúltera que lavó los pies de Jesús y los secó con sus cabellos? Espera un momento ¿No supiste que Lady Gaga comentó un post nuestro?… entonces detente un poco y entra aquí.

Todo esta imagen que gira entorno a ella le ha dado la licencia a los artistas de todos los tiempos para que la representen dotada de extraordinaria belleza y de indudable voluptuosidad, permitiéndose unas libertades que no se han permitido con ningún otro personaje evangélico. Piénsalo, una santa retratada así a lo largo de la historia. ¿Será verdad?

El Papa emérito Benedicto XVI, quien todos sabemos que es un erudito en todo lo que se puede ser erudito, nos ofrece una catequesis sobre quién fue realmente, sobre qué fue lo que hizo y no hizo, sobre qué es lo que los textos bíblicos dicen realmente y sobre todo, por qué es un personaje tan importante y reconocido dentro de los más cercanos a Jesús. Queremos presentarte esta catequesis confrontando lo que se dice de María Magdalena, con lo que realmente se sabe de ella y lo que la Iglesia enseña, de seguro su testimonio real de discípula, te hará no solo venerarla como la Santa que es, sino que comprender cómo es que el Señor toca los corazones y convierte las vidas. Tal como lo hizo con ella, puede hacerlo contigo.

¿María Magdalena era una mujer adúltera? Una reflexión auspiciada por Lady Gaga

¿Es María Magdalena la pecadora perdonada por Jesús?

Un episodio reconocido es el de la mujer que entra precipitadamente en la casa donde Jesús estaba, lleva un alabastro con perfume y llorando lo derrama a los pies del Señor y los seca con sus cabellos. Dice el texto que era una mujer pecadora.
El dueño de casa cuestiona a Jesús y el termina diciendo: «Ella ha ungido mis pies con perfume. Por eso te digo que quedan perdonados sus muchos pecados, porque ha mostrado mucho amor. A quien poco se le perdona, poco amor muestra.» Y le dijo a ella: «Tus pecados quedan perdonados.» Los comensales empezaron a decirse para sí: «¿Quién es éste, que hasta perdona los pecados?» Pero él dijo a la mujer: «Tu fe te ha salvado. Vete en paz.»” (Lc. 7, 36-50).
Posterior a este relato, en el mismo evangelio de San Lucas pero un capítulo después aparece explícitamente el nombre de María Magdalena. De ahí se asocia a que ambas fueran la misma mujer: «Recorrió a continuación ciudades y pueblos, proclamando y anunciando la Buena Nueva del Reino de Dios; le acompañaban los Doce, y algunas mujeres que habían sido curadas de espíritus malignos y enfermedades: María, llamada Magdalena, de la que habían salido siete demonios, Juana, mujer de Cusa, un administrador de Herodes, Susana y otras muchas que les servían con sus bienes” (Lc. 8, 1-3).

¿María Magdalena fue prostituta?

“Después de esto, Jesús caminaba por pueblos y aldeas predicando y anunciando el reino de Dios. Iban con él los doce y algunas mujeres que había liberado de malos espíritus y curado de enfermedades: María, llamada Magdalena, de la que había expulsado siete demonios” (Lc 8, 1-2).
Así es como la Biblia nos presenta a María Magdalena como una mujer que fue sanada. Con el paso del tiempo se realizaron asociaciones posteriores, sin ninguna base bíblica, que le confirieron la categoría social de prostituta. Esto provocó que en la representación artística, María Magdalena fuera representada como tal, presentándola con todos los atributos característicos de su condición social, además de una indumentaria amarilla que remarcaba la simbología de pecadora.
Pero si uno revisa el texto de San Lucas esta asociación queda en el aire y más bien nos da a entender que, María Magdalena sería cercana a la figura de Juana, mujer de Cusa, administrador de Herodes, lo que la convertiría, bien al contrario de lo que ha venido sosteniéndose tradicionalmente, en mujer de una cierta posición social, posiblemente incluso rica en cuanto que era una de esas mujeres de las “que servían con sus bienes” a Jesús y a sus acompañantes.

Era tan pecadora que por eso tenía 7 demonios que Jesús tuvo que sacar. ¿Será cierto?

Todo parece indicar que dicha asociación, un poco forzada, es debida a la Homilía 33 del Papa San Gregorio I Magno, pronunciado en el año 591:
“La que Lucas llama pecadora y Juan, María, creemos que es la María de la que según Marcos fueron echados siete demonios. ¿Y qué si no todos los vicios significan esos siete demonios?”.
Sabemos que la de los siete demonios es María Magdalena, pero sería atrevido afirmar que esos demonios los consiguió gracias a su vida adultera y desenfrenada. Esa afirmación, además de no tener sustento bíblico, indicaría que todos por ser pecadores tenemos al demonio dentro.

¿De qué tenemos certeza sobre María Magdalena

Lo único incontrovertible que conocemos sobre su persona es que de su cuerpo sacó Jesús siete demonios : “Después de esto, Jesús caminaba por pueblos y aldeas predicando y anunciando el reino de Dios. Iban con él los doce y algunas mujeres que había liberado de malos espíritus y curado de enfermedades: María, llamada Magdalena, de la que había expulsado siete demonios” (Lc 8, 1-2)

María Magdalena fue seguidora fiel de Jesús pues Él la salvó de ser apedreada. ¿Es cierto eso?

Probablemente es culpa de Mel Gibson y la imagen que nos presenta de María Magdalena en «La Pasión de Cristo».
En el Evangelio de San Juan 8, 1-11 se relata sobre aquella mujer sorprendida en adulterio a la que Jesús salva de ser apedreada y a quien luego le dice que se levante, se valla en paz y no vuelva a pecar. El relato bíblico no hace ninguna referencia de que esta mujer sea María Magdalena, pero el imaginario colectivo tiende a relacionar a cualquier mujer pecadora, sobre todo cunado sus pecados tienen que ver con la libertad sexual, con María Magdalena.

¿Cuántas Marías Magdalenas aparecen entonces en los Evangelios?

La tradición de la Iglesia tiene varias posturas sobre la figura de María Magdalena. Se debate si la mujer que aparece en varios pasajes del Evangelio es una o tres mujeres:
1- La pecadora que unge los pies del Señor. (Lc. 7, 37-50).
2- María Magdalena, la posesa liberada por Jesús, que se integró a las mujeres que le asistían (Lc. 8; Jn 20, 10-18) hasta la crucifixión y resurrección.
3- María de Betania, la hermana de Lázaro y Marta. (Lc. 10, 38-42).
La liturgia romana, siguiendo la tradición de los Padres Latinos (incluyendo a Gregorio Magno y San Agustín) identifican los tres pasajes del Evangelio como referentes a la misma mujer: María Magdalena.
La liturgia griega, siguiendo a los Padres griegos, sin embargo, las reconocen como tres mujeres distintas.
El santoral litúrgico actual celebra a María Magdalena utilizando las referencias a su encuentro con Jesús resucitado.

¿Es cierto que fue testigo cercano de la Pasión?

El relato bíblico dice: «Había allí muchas mujeres mirando desde lejos, aquellas que habían seguido a Jesús desde Galilea para servirle. Entre ellas estaban María Magdalena, María la madre de Santiago y de José, y la madre de los hijos de Zebedeo» (Mt 27:55-56). Y no solo estaba ahí, sino que fue testigo del entierro del Señor cuando se cerraba su sepulcro según nos relatan simultáneamente los Evangelistas en Mateo 27, 60-61 y Marcos 15, 46-47.

¿Y por qué su figura se vuelve tan importante para nosotros?

La buena noticia que Jesús nos comparte se hace realidad sobre todo con su Resurrección, por lo tanto ser testigo de aquel acontecimiento es algo grande:
«Jesús resucitó en la madrugada del primer día de la semana y se apareció en primer lugar a María Magdalena, de la que había expulsado siete demonios. Ella fue a comunicárselo a los que lo habían acompañado, que estaban tristes y seguían llorando» (Marcos 16, 9-10).
Es Santa María Magdalena la primer testigo de la Resurrección, dichosa por el privilegio de volver a ver a su «Rabboni» (Maestro) corre de regreso donde estaban los discípulos y se convierte en la primera en anunciar lo que para nosotros es la más grande de las noticias: ¡El Señor ha resucitado!.