Hace apenas unos días el Papa Francisco estuvo de visita en Abu Dhabi. Una visita histórica, es la primera vez que un Papa visita los Emiratos Árabes Unidos y además se ha firmado un documento entre la Iglesia católica y la Universidad de Al-Azhar, que constituye el lugar cultural y religioso más importante del islam suní. El documento trata sobre la hermandad humana por la paz en el mundo y la convivencia común.

Esta visita ha sido de suma importancia a todo nivel, no solo porque nos habla de la posibilidad de un encuentro interreligioso pacífico, sino también de trabajo en conjunto por conseguir un mundo mejor. Hemos querido resumir algunas frases muy significativas que han tenido lugar en dicho encuentro, que apuntan hacia una vivencia de la fe cristiana que no siempre es tan evidente. Más aún en nuestros días donde la crisis ha traído discordia incluso entre los propios creyentes.

1. La vida cristiana se trata de una relación con Dios

El papa Francisco una vez más nos recuerda que la vida cristiana «no se presenta como una lista de prescripciones externas a cumplir o como un conjunto complejo de doctrinas a conocer». No se trata de cumplir reglas solamente. La vida cristiana se trata de «conocer, en Jesús, a los hijos amados del Padre. Es vivir la alegría de esta dicha, es entender la vida como una historia de amor, la historia del amor fiel de Dios que nunca nos abandona y quiere hacer comunión con nosotros siempre. Esta es la razón de nuestra alegría, una alegría que ninguna persona en el mundo y ninguna circunstancia de la vida puede quitarnos. Es una alegría que da paz incluso en el dolor, que ya ahora nos hace anticipar esa felicidad que nos espera para siempre».

Esto de ninguna manera quiere decir que dejemos de lado la doctrina, ni sus normas, pero por encima de ella necesitamos buscar el rostro de Dios, esforzarnos por conocerlo más, por unir más nuestra vida a la suya a través del amor, de la alegría que significa ser cristiano.

2. El camino de Dios no está exento de problemas

La vida cristiana no es un jardín de rosas. No se trata de estar con Dios, la Virgen y los santos para que me vaya bien en la vida. Se trata de un camino de amor, se trata de «vivir como bienaventurados y seguir el camino de Jesús (que) no significa, sin embargo, ser siempre felices. Los afligidos, los que sufren la injusticia, los que se esfuerzan por ser pacificadores saben lo que significa sufrir». El sufrimiento es parte de la vida y saber que tiene un sentido, hace que el camino sea más llevadero.

3. Aunque en la vida te encuentres solo, Dios siempre está contigo

Las guerra, las situaciones políticas y económicas de distintos países han causado que muchos tengan no solo que abandonar su hogar y su país, sino también a su familia y seres queridos. El Papa Francisco con palabras de consuelo se dirige a todos aquellos extranjeros que viven en Abu Dhabi y con estas palabras a todos los que en el mundo viven lejos de casa: «No es fácil para ti vivir lejos de casa y quizás sentir, además de la falta de seres queridos, la incertidumbre del futuro. Pero el Señor es fiel y no abandona a los suyos».

4. No somos superhombres

El Papa Francisco nos recuerda que las exigencias de Dios no son para superhombres, son para hombres que viven el día a día. Que se esfuerzan por ser buenos cristianos y llevar la buena nueva: «Las Bienaventuranzas no son para superhombres, sino para aquellos que enfrentan los desafíos de cada día. El que los vive según Jesús hace que el mundo sea limpio. Es como un árbol que, incluso en suelo seco, todos los días absorbe aire contaminado y devuelve oxígeno. Deseo que así sea, bien arraigados en Jesús y dispuestos a hacer el bien a quien esté cerca de ustedes. Que sus comunidades sean oasis de paz».

5. La importancia de leer los lenguajes de culturas distintas

En una visita donde queda demostrada la importancia del diálogo interreligioso y la verdadera tolerancia, el Papa Francisco a través de estas palabras nos recuerda que necesitamos saber acoger al que es distinto: «Yo interpreto todos los gestos de bienvenida como gestos de buena voluntad. Cada uno los hace según sus propias culturas. He encontrado una gran acogida: querían hacer de todo, pequeñas cosas y grandes cosas porque sentían que la visita del Papa era algo bueno. Alguno incluso dijo una bendición, Dios lo sabe. Querían hacerme sentir bienvenido».

6. La paz necesita del conocimiento y de la búsqueda de la verdad

El Papa Francisco luego de reunirse con el consejo de ancianos (Consejo de Sabios musulmanes) no habla entre líneas de la sabiduría que se alcanza con el devenir de la vida. Nos recuerda la importancia de formarse y anhelar la verdad: «El camino de la sabiduría y de la fidelidad te lleva a construir la paz, que es la verdadera obra de la sabiduría y de la fidelidad».

Aprendamos a ver las visitas del Papa no solo como una alegría, es el representante de Cristo en la Tierra, estemos atentos a lo que como Cabeza de la Iglesia nos enseña con sus palabras y con sus gestos.

7. Necesitamos crecer en una cultura de diálogo

Puedes leer el documento «Fraternidad humana por la paz mundial y la convivencia común» firmado por Su Santidad el Papa Francisco y el Gran Imán de Al –Azhar Ahmad al-Tayyib aquí. Creo que este documento es un signo de lo que como cristianos necesitamos aprender y empezar a hacer. La cultura del diálogo, de no temer a lo distinto, sino aprender a dialogar con ello. De abrir nuestro corazón así como Jesús lo hacía con todos. No es bueno enfrentarnos en el odio, en el miedo, sino más bien tratar de escuchar y buscar en el corazón el sello de Dios. Un sello que llevamos todos.