Screen Shot 2013 12 24 at 18.17.441

Screen Shot 2013-12-24 at 18.17.44Catholic-link.com – Navidad: Sinónimo de alegría, de compartir, de estar en familia, de pasarlo bien. Pero también de preocupaciones, compras, tensiones, stress, correrías, etc. Pero… ¡Un momento! ¿Y Jesús? ¿Acaso nos olvidamos de a Quién realmente estamos celebrando? Este divertido video, nos ayuda a bajar un poco las revoluciones, y centrarnos en lo esencial de este tiempo.

Este sencillo pero agudo sketch, nos presenta a un Jesús bonachón, que se encuentra con un joven visiblemente atareado por las actividades que tantas veces ocupan nuestro tiempo en estos días previos y durante la Navidad. El joven va relatando en lo que se convierte prácticamente en un monólogo, sus actividades, sus gustos, sus expectativas para esta fecha tan importante; siempre dejando en claro, que él entiende el verdadero sentido (aunque termina siendo algo sólo de palabra).

«Ha sido un día de locos» comienza diciendo el joven. ¡Cuántas veces no tenemos esa misma experiencia en estas fechas! E incluso cuántas veces, como el joven del video nos quejamos de otros diciendo: «Hay tanta gente que pierde el sentido».  Cuando nuestras propias acciones pueden reflejar eso mismo que criticamos. El personaje que representa a Jesús en el video, finalmente interrumpe, invitándolo a «ir más despacio» y darse un tiempo para «tomar un café con Él», ayudando a retomar el centro de tantas celebraciones y actividades, y dejarse amar por Jesús y compartir ese amor con los demás.pesebre-belen-familia

Sucede que muchas veces ocurre lo mismo con nosotros: dejamos de lado a Jesús y su Nacimiento en el humilde pesebre de Belén en brazos de Santa María y San José, y no lo dejamos «tener una palabra en nuestra vida», cuando es Él mismo la Palabra que «se hizo carne y puso su morada entre nosotros» (Jn 1, 14).

Dejemos que Jesús, entre en nuestras vidas en esta Navidad. ¡Démosle el tiempo y el espacio que se merece en nuestras vidas y en nuestros hogares! Seamos justos, ¡Es su celebración! Y que así, todas nuestras actividades (que pueden tener un fin muy bueno, nadie lo duda) como son la unión familiar, el compartir, el vivir la alegría, entre otros; encuentren su centro y su fuente en el corazón de la Navidad, que es el Nacimiento de Jesús, Dios con nosotros.

¡FELIZ NAVIDAD!