

Las santas virtudes se comparan con la escalera de Jacob, y los vicios con la cadena que cayó de las manos de San Pedro. Pues las virtudes, enlazadas unas a otras (por casualidad o consecuencia natural) forman una perfecta escalera que nos conducen hasta el cielo; pero los vicios, unidos entre sí como eslabones, forman una escalera espiritual que tiene a los hombres presos en el pecado y los lleva hasta el infierno. — La Santa Escala, noveno escalón, punto 1