Jesús entregó su vida por amor a nosotros. Así, una madre que está pensando en abortar debería ser ayudada a amar. Es decir, a poner en segundo lugar sus proyectos y su tiempo libre, y a respetar la vida de su hijo. También el padre del niño, quien quiera que sea, debe mostrarse disponible. Todo país que acepta el aborto es porque su gente no ha aprendido a amar, sino que recurre a la violencia para obtener lo que quiere. Jesús dijo: «El que recibe a un niño como éste en mi nombre, a mí me recibe.» Al adoptar un niño, esas parejas reciben a Jesús; por el contrario, al abortar, rechazan a Jesús. — Pensamientos de la Madre Teresa de Calcuta. Página, 9